Un telón de nieve cubre buena parte de la Patagonia y empiezan conocerse las historias de personas que quedaron aisladas por el temporal. Es el caso de un trabajador rural de Santa Cruz, que estuvo un mes sin recibir provisiones por las inclemencias del clima.
El hombre, que ya se había quedado sin víveres indispensables para la supervivencia en la nieve y el frío extremo, se negó a ser rescatado para no abandonar a sus perros.
También se había quedado sin combustible, un insumo básico para encender el grupo electrógeno con el que los lugareños obtienen la energía.
El trayecto desde Rospentek hasta el puesto dura 30 minutos. Desde el aire, Santa Cruz es una monótona y dramática superficie blanca. Se ven guanacos que saltan entre la nieve y a lo lejos se encuentra el rancho del solitario Leipichún.
Tras la alerta de la vecina, el Ejército montó un operativo de emergencia con un helicóptero. El vuelo hasta el puesto duró 30 minutos y lograron darle asistencia.
Cuando los rescatistas intentaron evacuarlo, el peón rural se negó de manera rotunda: “No puedo dejar solos a mis seis perros”, dijo, según reproduce La Opinión Austral.
El trabajador rural explicó que los perros, sin su presencia, “se morirían de hambre o frío”, con temperaturas registradas en esa provincia inferiores a los 0 grados centígrados.
Fuente: Tn.