Todos los que bajaron y caminaron por el lugar quedaron sorprendidos. No dudaron en definirla como “una obra de ingeniería”. “Le pusieron hasta alfombra”, repetían asombrados. Se referían al túnel que una banda criminal hizo en una calle de San Isidro con el objetivo de robar las cajas de seguridad de una sucursal del Banco Macro.
El túnel comenzaba en un galpón tipo depósito situado en Chacabuco al 500 y cuando fue descubierto ya estaba a la altura de la puerta de la sucursal bancaria, en Chacabuco 444.
Una calificada fuente judicial calculó que los delincuentes pudieron estar cavando y sacando tierra durante un año.
Todo se descubrió después de que se descubriera una varilla de hierro que sobresalía de los adoquines de la calle Chacabuco, a pocos metros de la puerta del banco.
Si bien todavía falta la confirmación oficial, en un primero momento, los peritos de la policía bonaerense que caminaron por el túnel calcularon que tenía una longitud de 220 metros y casi 3,60 de profundidad hecho.
En el depósito elegido por los delincuentes para comenzar el túnel funcionó tiempo atrás un taller de chapa y pintura de autos. En este lugar se encontraron bolsas plásticas llenas de la tierra que sacaban para hacer el pozo.
“La planificación para hacer el túnel que tenía la intención de llegar hasta la sucursal del Banco Macro fue superior a la que llevaron adelante los delincuentes que protagonizaron el denominado Robo del Siglo [por el golpe ocurrido el 13 de enero de 2006 en la por entonces sucursal Acassuso del Banco Río donde un grupo de ladrones vació 145 cajas de seguridad y se llevó un botín millonario, estimado en 19 millones de dólares]”, dijo una fuente de la investigación.
Fuente: La Nación.
