En medio de gritos racistas, tales como «esto no es Ostende, vayan al Conurbano a tomar mate, negras, ratas, pagamos 50 mil dólares por estar acá», denunciaron que una golfista y su pareja atacaron a golpes a una platense, que hace dos décadas tiene casa en esa ciudad balnearia. A la víctima la habrían atacado a palazos en medio del campo de juego y terminó con varios hematomas y muy dolorida.
Fuente: hechos y derechos.