Un auto quedó incrustado debajo de un camión en el ramal Campana de la autopista Panamericana, mano a Provincia, este viernes por la madrugada. Era perseguido por la Policía bonaerense, luego de haber esquivado un control y casi atropellado a un agente.
En el vehículo viajaban cuatro personas y tres murieron en el lugar. Gendarmería inició la investigación del caso para establecer detalles de la persecución y si se produjeron disparos. Se comprobó que el auto era robado y el conductor perdió el control tras cruzar el peaje del ramal Campana.
El fatal accidente ocurrió a la altura del kilómetro 33,7, sentido al norte, cerca de las 4:30 de la mañana.
Según los datos que se conocieron hasta el momento, el auto Volkswagen Vento, ocupado por 4 personas era perseguido por la Policía.
Al parecer, a partir del monitoreo de las cámaras de seguridad de la zona, detectaron una “actitud sospechosa” de parte de los ocupantes del vehículo. Comprobaron que la patente estaba adulterada, no pertenecía a ese auto, sino a otro, radicado en San Isidro.
Por ese motivo lo intentaron detener en un control, a la altura de un conocido boliche, en Bancalari, pero no detuvo la marcha. Incluso aumentaron la velocidad, y estuvieron cerca de atropellar a uno de los agentes. A partir de entonces, se inició la persecución.
Con el avance de la investigación, se busca también comprobar si hubo algún disparo por parte de los policías hacia las cubiertas del auto, dado que fue la versión que circuló en principio.
Sin embargo, todavía se desconoce cuál habría sido el motivo por el que el conductor del vehículo perdió el control. Una posibilidad es que haya sido la barrera del peaje del ramal Campana, que arrastró al cruzar.
Segundos después, se incrustó debajo de un camión que estaba estacionado. Tres ocupantes murieron en el lugar y la cuarta persona fue trasladada al hospital.
Al lugar del accidente, llegaron Bomberos y Gendarmería, que realizaba los peritajes pasadas las 7:30.
Una mujer llegó a la zona del fatal accidente en busca de información, debido a que, según explicó, era la madre de una posible pasajera del auto. Horas más tarde se comprobó que su hija, Malena Chiocconi, de 21 años, viajaba como acompañante y fue una de las víctimas fatales.
