El episodio de violencia fue protagonizado, en principio, por un hombre y un guardavidas cuando presuntamente el sujeto intentaba ingresar a bañarse a un sector que no está habilitado para tal fin.
Fue en este contexto que comenzó un intercambio de insultos y agresiones verbales que fueron escalando hasta que terminó en golpes de puño.
Ocurrió en la zona sur de Playa Unión, cerca de la escollera, y ante la situación tuvieron que intervenir otros guardavidas y vecinos para intentar calmar a los protagonistas.