“Tal vez sea al día de la fecha el propietario de la bicicletería más antigua de la ciudad de Saladillo, nació el 8 de agosto de 1930,por esa coincidencias del destino el mismo día y año que había nacido mi querida madre. Hombre de buen trato con la gente, al menos esa es mi experiencia persona con el, muy conversador y le gusta hablar de todos los temas entre ellos de política. Hace cincuenta años atrás aproximadamente le compre en cuotas mi primera bicicleta,y luego iba a su local de venta asiduamente para inflar la cubiertas y hacer alguna eventual reparación de la misma. Me acuerdo que el inflador estaba en la vereda disponible las 24 horas del día y siempre estaba expuesto a algún acto de vandalismo que le practicaban los jóvenes y no tan jóvenes que recorríamos las calles de nuestra ciudad hace mucho tiempo atrás. El propietario de la bicicletería vivía y vive en la calle Marcelo T. de Alvear entre Av. San Martín y Av. Rivadavia, yo entre los años 1979 y 1984, vivía en una casa alquilada en la Av. San Martín 2014 casi esquina Zamorano y trabajaba en el Banco Local Cooperativo Limitado( hoy Sucursal Saladillo del Banco Credicoop),de manera que cuando regresaba al banco luego de haber almorzado lo hacía por la Avenida Rivadavia y en la esquina de M.T de Alvear me encontraba con el propietario de la bicicletería motivo de este relato y nos íbamos conversando hasta la entidad bancaria. Siempre con Juan José Fernández ( con quién también trabajamos juntos en el Banco Local) nos acordamos que cuenta corriente que tenía llevaba el número 359. Este hombre se llama Idelmar Osvaldo Lacunza hace más de 70 años que tiene la bicicletería en el mismo lugar, donde muchas generaciones de saladillenses al igual que yo habrán adquirido la suya. Empezó trabajando con su hermano Julio Andrés Lacunza, quién luego se dedicara al rubro de ventas de motos, quedando el rubro de la bicicletería a su cargo. Hace un tiempo mi hermana Elena fue a su bicicleteria y le pregunto: “ Que hace “el Goro” ahora que no es Intendente? Hace mucho que no lo veo? Me gustaría charlar con él?” Notificado por parte de mi hermana del diálogo con Osvaldo, dentro de la planificación de las visitas que estoy realizando a los vecinos de mi ciudad me llegue hasta su local comercial y ahí lo encontré con la cordialidad de siempre. Charlamos un rato y empezamos a repasar las primeras bicicleterías de Saladillo,me refirió a una que había existido cerca del correo cuyo propietario era un señor de Necochea. Nos acordamos de que Roque Fernando Bianchi tuvo la suya ubicada en los primeros tiempos en la Av. Moreno casi Bmé. Mitre para luego trasladarse al barrio Apeadero (Rivadavia casi Frocham), de Cesar Nanni (Moreno entre Emparanza y Bozán)la de Palazzi en 12 de Octubre entre Mitre y Rivadavia, la de Omar Sánchez ubicada en calle Sojo entre Almafuerte y Alem, la Nito Suarez sobre la Avda. Cabral entre Rivadavia y Mitre, probablemente en este relato de memoria me estoy olvidando de algunas. No voy en esta oportunidad hacer referencia a los locales que existen actualmente, quizás en otro momento, son varios y cada uno tiene su historia. Como esta nota de alguna manera es autoreferencial he querido rescatar el comercio donde adquirí mi primera bicicleta. La bicicleta ha sido un medio de movilización muy importante en mi vida dado que mi primera campaña política para acceder a la Intendencia Municipal la hice en bici. Osvaldo Idelmar Lacunza es toda una leyenda en el rubro al que se ha dedicado toda su vida, de su unión matrimonial con Luján María Castellano nacieron sus hijos Adriana y Oscar Osvaldo. Decenas de anécdotas de su vida comercial pueblan la memoria de este vecino propietario quizás de la bicicletería más antigua de la ciudad. Osvaldo con sus 87 años sigue trabajando con el mismo entusiasmo que cuando yo era “un pibe” lo conocí. Osvaldo es un peronista de ley, cuando lo defino de esta manera, quiero decir que ha adherido desde siempre a la causa de la justicia social que ha pregonado el Juan D. Perón al dar nacimiento al movimiento político que ha tenido y tiene gran gravitación en la historia del país. Como símbolo de amistad siempre regalo un mate en este caso a Osvaldo le regale uno con la imagen de Perón y Evita. Fue para mí una agradable visita la que realice, reitero, a quién me vendió la primera bicicleta, a un buen vecino de la ciudad, que sin duda con su trabajo ha contribuido al crecimiento de la misma. Estas líneas pretenden tributar un pequeño homenaje a Idelmar Osvaldo Lacunza, un hombre de bien de nuestra comunidad”
Carlos Antonio Gorosito, Ex -Intendente Municipal, 8 de noviembre de 2017.