Luego de finalizada la primera jornada de la Muestra Munay, en la Casa Museo Susana Esther Soba, la emblemática cuna del arte y la cultura local, sus creadoras recibieron a Convergencias para mantener una cálida charla sobre cómo nació esta actividad y cómo vivieron este primer encuentro con el público.
Valeria Di Pascuale, artista plástica; Jimena Cardenas, escultora; y Sandra Garate, escritora confluyeron en pensar y diseñar esta propuesta artística multidisciplinaria y describieron las sensaciones que vivieron en la tarde de este sábado al poder compartir el resultado de esta mancomunión.
“Mucha emoción. Los días de las muestras se respira una vibra interesante. Es la devolución del público. Esta bueno porque ves y sabes si la gente viene, si responde bien o no; si les gusta lo qué haces. Te genera ansiedad, nervios. Mostrar lo que uno hace es todo un tema. Uno lo hace pero después mostrar es como desnudar un poco el alma”, se aminó a poner en palabras Valeria Di Pascuale.-
“Cuando uno hace ya lo sube a Instagram o Facebook ya lo empieza a mostrar, entonces es como que no era tan pudorosa por ese lado, pero si como lo hicimos con tanto amor y buscando el detalle, te todo este amalgamado, que sea como dicen los del vino “redondo en boca”. Entonces después de todo ese esfuerzo, lo que quería es que venga gente a verla, y no paró de venir gente. Lo que siento es gratitud”, agregó Jimena Cardenas.
“Gratitud, emoción. Fue una invitación a participar y eso habla también de la grandeza de ellas como artistas de abrir la puerta para la literatura, para la escritura. Me pasa eso de sentirme en otra dimensión por toda esta experiencia. Gente que uno conoce de otro lugar o que no conoce y se acerca a dar su apreciación, moviliza mucho”, expresó Sandra Garate.
El nombre elegido para nuestra es un término que proviene de la cultura y cosmovisión andina. Es un código andino qué significa que cuando uno hace algo tiene que estar al cien por ciento de que es lo que desea, lo hace con amor y con esa decisión de que deseas eso y que podes hacerlo. “Hicimos la muestra bajo ese código andino. Le dije a Vale y le encantó”, expresó Jimena.
“Me fui incentivando y motivando con la obra de Jimena para pensar que ganas de hacer algo así e incluir dentro de mi obra. Hago retratos y el tiempo que tengo para dedicarle a mi obra es casi nada. Tuve que parar un poco eso para hacer lo que ustedes ven acá. La parte de pintura la trabajamos juntas. Y después lo que hay en otro sector, que me dicen sos otra persona. No, soy la misma y quizá no están acostumbrados a ver esa técnica o ese estilo. Pero es algo que hacía en otro momento. Por ahí es volver al dibujo que me acompañó tantos años. La pintura es más reciente en mí, si bien el público la conoce”, detalló Valeria.
“Cuando me escribió Vale obviamente dije que si en esto de compartir, abrirse. Es la primera vez que estoy en una muestra así compartiendo con otros artistas desde este lugar y me interpela mucho eso también, de compartir, abrir a otros lo que escribo y no guardarlo. Aparecían ahí las palabras y los poemas”, recordó Sandra de cómo surgió la propuesta.
“Realmente siento que hago cosas simples que tienen que ver con la vida, material, que sería esta sala donde está todo lo erótico que tiene que ver con la última esfera de ese árbol de la vida, también estudio y practico Kabalá, que trata de eso no, de lo material, de la sexualidad, del trabajo, de la alimentación, del cuidado del cuerpo. La otra sala trata de lo más profundo que tiene que ver con el alma, en la pintura, en los poemas y en las esculturas tienen que ver con lo espiritual, con la relación con la naturaleza, con el universo, con otros seres”, contó Jimena quien además describió que comenzó a hacer en pandemia y en la casa de sus padres, parte del material que hoy presenta en esta muestra.
“Fui haciendo una práctica chamánica que se llama viajes de tambor. Cuando terminé con la serie erótica empecé con la serie chamánica, que es con la que sigo trabajando ahora”, Jimena.
En cuando al giro en la técnica y eje de los trabajos para esta muestra Valeria definió que “creo que esas cosas están adentro, pero no tengo el tiempo para hacerlo. Vivimos en una sociedad de consumo, uno tiene que tener la plata para pagar los impuestos todos los días, entonces hago una obra que es la que me permite pagar mis cosas y no tengo el tiempo para hacer lo otro. Los procesos creativos los hago en mi cabeza. Quizá estén años en mi cabeza y después llevarlos a la materialización de esa obra lo puedo hacer en un día. De hecho lo hice en un día. ¿Qué Que me falta? Me falta que me digan tal día la vamos a hacer. Eso me falta: ponerle un día como para decir a esto lo dejo y hago aquello. En este caso hice dibujo porque quise volver a esos dibujos que hacía cuando vivía sola. Dibujos de estos tengo en mi poder lo qué pasa es que nunca los muestro. Son dibujos, era lo que en ese momento a mi me gustaba y ahora digo ¿Por qué no hacerlo? Y si me incentiva la obra de Jime que tiene un montón, algo hay que poner, te moviliza. A mi me gusta trabajar en equipo. Es genial cuando se juntan otras personas”.
“Tomando las palabras de Sandra, esto fue como abrir la puerta para ir a jugar. Lo tomamos con un disfrute. La pasamos bomba armando la muestra. Y ya viniendo a lo de Susana también”, manifestó Jimena.
Cómo se le pone palabras a la muestra fue la consulta a Sandra Garate. “Hoy surgieron muchas quizá son las mismas o por el proceso del día aparezcan otras: mujeres; poder, disfrute; alegría, convicción, arte, pasión”, expresó la escritora que viene con una trayectoria en contenido para niños. “Lo que me habilitó es muestra es a escribir desde el deseo. Quizá a eso lo tenía guardado. Tengo etapas dónde escribo sobre algo determinado y hoy Justo una compañera maestra jardinera me dijo no dejes de escribir para niños. Siento que sin etapas también. Esta muestra me motivó a escribir desde otro lugar y siento que escribir también es sanar. Siento ese proceso de sanación y de liberación desde la escritura. Por eso también es tan movilizador”, expresó Sandra.
En cuanto al empoderamiento que implica realizar una propuesta artística y exponer las cuestiones más profundas que genera variados significantes, Jimena definió que “El poder es el empoderamiento de hacer una escultura de nuestra vida. Es como tomar la sartén por el mango y ser reinas de nuestra propia vida”.
“A mi me pasa algo medio raro, yo pinto y después que cada uno interprete. Quizá no sea buena con las palabras. Lo que no puedo explicar lo digo con la pintura y que cada uno interprete lo que quiera. No me gusta explicar las obras, no me gusta la hoja A4 explicando la obra. Hago lo que siento y si después gusta o no gusta, a mi me han dicho que la muestra anterior que hice acá a mucha gente no le gustó y bueno es válido también, porque son sentimientos, son momentos en lis que uno está, en que uno se encuentra. No pienso mucho en eso, hago”.
“Es de adentro hacia afuera. Hay partes en que a uno le resulta importante la crítica, pero después es de adentro hacia afuera”, refirió Jimena sobre la consulta de cómo plantearon la muestra con lo que significa que tres muñeres propongan estas temáticas y en cuanto a cómo el arte interpela personal y socialmente lo que en otra época hubiera sido más cuestionado o con otra perspectiva.
“Si bien me inspiré en muchas de sus obras, tiene que ver con cosas que me han pasado a mi o qué deseo que me pasen. Entonces es un camino personal también de búsqueda y de sanción de cuestiones que uno tiene como ser humano. Quizá en eso de sanar lo propio, otras personas se encuentran en el mismo camino. Con historias en común y que encuentran en eso que uno escribe el mismo camino que uno encuentra. Entonces bienvenido sea. Y aquel que no a mi me pasó detener mucho tiempo mi obra guardada y no aniñarme a compartirla por la crítica. Hubo un momento en el que hice ese click de decir porque no compartirlo y esta buena la crítica, al que le guste, al que no le guste. Me siento feliz abriendo mi yo hacia otros. Y también es una realización personal”, agregó Sandra.
“Creo que es catártico. Primero cuando lo pensaste, después cuando lo estás haciendo y lo terminaste, y después es catártico para el otro porque por ejemplo hay gente que se ha ido llorando. Algo pasó que esa persona pudo exteriorizar al mirar una obra, participar en una obra, igual que nosotras cuando la hicimos. Pienso que es ”, concluyó Jimena Cardenas.-
“El arte tiene que movilizar, sensibilizar, romper estructuras. El arte es una expresión del alma, lo más sincero. Si no entendemos el arte así no funciona”, finalizó Valeria Di Pascuale.-
Este domingo 21 de agosto de 18 a 20 horas se podrá disfrutar la segunda jornada de esta bella y movilizante muestra de las artistas saladillenses.
Para ver el video en vivo con la entrevista completa podes ingresar al siguiente link 👇👇
https://www.facebook.com/convergencias.digital/videos/756013082345122
En nuestro Instagram 👇👇
Saladillo, 21 de agosto de 2022.-
