El pedido de las madres de cuatro jóvenes detenidos por el hurto de un celular llegó a nuestro medio a través de una familiar.
Los jóvenes privados de la libertad tienen entre 17 y 20 años. El dueño del celular, un menor de 17. De los primeros, tres son primos y acostumbraban salir a bailar juntos. Se trata de Carlos de 17 años; Tomas Bustamante de 18 años; Tobias ortiz de 19 años y de Cristian López de 20 años. el menor que inicialmente fue damnificado tiene 17 años y el celular fue devuelto en la comisaría por la familia de uno de los jóvenes.
Quien ha recorrido los pasillos helados de los penales, o ha tenido la posibilidad de estar dentro pero del otro lado de los cerrojos sabe que se huele a humedad en esos lugares. Pero quien ha estado allí, en mi caso del lado de afuera, una ve desigualdad, esa vara que pega feo y casi siempre para el mismo lado cuando no hay billete que sostenga afuera. Una sabe de ver una y otra vez que adentro hay muchos perejiles y afuera otros tantos señores de guante blanco que zafaron por tener otros recursos, no por otra cosa. Así están atiborrados los penales.
Cuatro chicos de condición socioeconómica » humilde», de entre 17 y 20 años de edad que se pasaron de listos por un celular, no hicieron otra cosa que sacarlo y luego devolverlo a los pocos días, hoy están conviviendo tres en una comisaría y el menor en un centro Leopoldo Lugones de la Ciudad de Azul. Los cuatro por primera vez privados de la libertad y vinculados al delito, ahora junto con expertos. Para los tres que están en comisaría la suerte no podrá ser peor, al confirmarse la prisión preventiva en breve pasarían a un penal común, cuya sede todavía las familias no conocen.
«Si pueden ayudarnos a difundir te agradecería mucho. Están super desesperadas las madres. Gracias y perdona» dice el mensaje inicial por el cual solicitan que podamos dar a conocer la situación en la que se encuentran cuatro jóvenes de la ciudad de General Alvear, de los cuales uno es menor, por el hurto de un teléfono celular a la salida del boliche «Tijuana» causa que caratulada «Robo Doblemente Agravado por su comisión en Poblado y en Banda por el uso de arma», una caratula que a todas luces se presenta sobreactuada y con alevosía para tanta indefensión.
Está mal, es reprochable una y mil veces la conducta de sustraerle un objeto a alguien. Pero los protagonistas no usaron ninguna arma, ni actuaron en banda. Las familias refieren que el Fiscal interviniente Cristian Cittera manifestó en algún medio que debía dar un ejemplo para una ciudad donde nunca se había dado un caso así. Desde el punto de vista jurídico las resoluciones judiciales y fallos en general son un ejemplo cuando reúnen coherencia entre los hechos y el derecho penal, no cuando equivocadamente algún tribunal u organismo pretende ejercer funciones del Poder Ejecutivo como lo son las de plantear ejes de política criminal. Si las declaraciones del fiscal son como lo cita el medio de prensa alvearense, resultaría no sólo una mirrada desacertada de la aplicación del derecho penal y una confusión con una decisión de política criminal ajena al poder Judicial, sino que constituiría una injusticia.
En dialogó con las madres indicaron que hecho ocurrió el 24 de marzo a la madrugada y que días después tres de los jóvenes fueron detenidos y los primeros días de abril el menor. Interviene la Fiscalía a cargo de Cristian Citterio de la Ciudad de Azul.
Carlos tiene 17 años y prisión preventiva desde el 9 de abril. Está en el Leopoldo Lugones de la ciudad de Azul. Lo detuvieron el 5 d abril y estuvo 5 días incomunicado, el 9 d abril tuvo la audiencia y el 10 lo pusieron con el resto de los menores en una celda. Convive desde hace casi un mes con 25 chicos, cada uno tiene su celda individual.
Una de las madres detalló en diálogo Convergencias «Pedimos las cámaras de afuera del boliche y nos dicen que no andaban. Los tres mayores van a ser trasladados a un penal pero no sabemos el destino todavía. Nooooo ni loco te atiende el fiscal, no somos nada para él. Pero públicamente le preguntamos como van a poner semejante caratula por un celular, y que ya se devolvió», precisó.
«Aca si hay grandes delitos que se tapan con dinero con un buen apellido y a eso, a eso de seguro no lo ve la señora justicia…. Pasan las horas los días las semanas y esto va de mal en peor sabe Dios como y donde terminen nuestros hijos por esto que fue un invento agravado sabe dios para que y con que propósito o a quien en realidad beneficia. Nosotros sus familias sabemos que clase de hijos, hermanos sobrinos tenemos, sabemos bien que buena familia somos y seguiremos luchando con ellos con la frente bien en alto. Un error todos lo cometemos pero esto que han hecho con ellos no tiene perdón y tarde o temprano van salir si dios quiere y nos ayuda».