Este Jueves 12 de junio el fiscal a cargo de la unidad Fiscal Descentralizada Nro. 2 de Saladillo realizó el requerimiento de desafuero a la titular del Juzgado de Garantías Nro. 7 de Saladillo Patricia Altamiranda.
Esto significa que el fiscal Javier Berligieri entiende que existien elementos suficientes para la imputación del delito denunciado y solicitó le sean retirados los fueros para que pueda ser sometido al proceso penal.
Si bien a Lissalde pocos se le animan por el poder que ha tenido sobre los destinos de saladillenses y que permitió impunidad sostenida, a diferencia de otras causas que duermen y que quedarán sin Justicia en los armarios del edificio de Moreno, el fiscal Berligieri en esta causa buscará el apoyo de la ciudadanía que no conoce su rostro ni voz de que deja a muchos desamparados, víctimas que no conoce, que no demuestra interes en conocer, lo que también es difícil desde la distancia territorial desde la que atiende las investigaciones saladillenses ya que poco y nada ha estado presente en Saladillo ya que tiene su despacho flotante.
Volviendo a Lissalde, el diputado que fuera mano derecha de Sergio Massa y actual aliado necesario de Kiciloff, tiene también un expediente de violencia familiar y un reclamo de alimentos ya que le pasaría a su hija una suma cercana a $160.000 mensuales entre otras cosas que por la índole del reclamo en el marco el derecho de familia deben ser resguardadas en el ámbito de la confidencialidad.
Las paradojas de la realidad lo muestran en una foto reciente con el anuncio de la designación de la jueza de familia para el flamante Juzgado de Familia de Saladillo.
En cuanto a Berligieri con este mérito ¿querrá seducir al oficialismo nacional por un lugar mejor que saque de las miserias mundanas de Cañuelas y Saladillo que tanto le molesta resolver?
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Saladillo, 13 de junio de 2025.-